Aún deberá cumplir varias semanas en el centro de rehabilitación Betty Ford, concretamente hasta el próximo 3 de enero, y Lindsay Lohan ya ha encontrado un nuevo hobby para entretenerse durante sus horas muertas, con el que, además, espera ver aumentar sus pobres ingresos cuando salga de la clínica.
Su ingreso en la clínica de rehabilitación y su adiós temporal a la ajetreada vida social hollywoodiense no han afectado en absoluto a la pasión que Lindsay Lohan ha sentido y sentirá siempre por la moda y el diseño. Por ello, mientras cumple las horas interpuestas por el juez, la actriz ha querido aprovechar sus ratos libres para seguir trabajando en su empresa 6126.
Junto a su socia, la también diseñadora Paz Shakked, Lindsay está trabajando en una nueva línea de bolsos que podría a salir a la luz muy pronto, poco después de que ella abandone la clínica el próximo 3 de enero.
De hecho, la propia Paz ha confesado que mantiene contacto casi a diario con la actriz de 'Chicas Malas' vía e-mail, con el fin de ultimar los detalles de sus diseños. "Intentamos compaginar nuestras agendas", explica la diseñadora. "Trabajamos muy bien juntas y tenemos muy buena química".
"Hablo con ella siempre que tengo la posibilidad", añade la diseñadora, que también ha trabajado para grandes firmas como Dolce & Gabbana. "Cada uno de los diseños está aprobado por Lindsay".
Aunque de momento no ha desvelado detalles sobre la línea de bolsos, de momento sabemos que no superarán los 107 euros y que tendrán una clara influencia del gusto de Lindsay.
Gracias a que parece estar tomándose muy en serio su tratamiento, Lindsay pudo disfrutar el pasado martes de un día de compras con un amiga en la que se gastó más de 150 euros en medias y ropa cómoda, probablemente para usar durante las semanas que le quedan en el centro de rehabilitación.
"Se compró un jersey de leopardo, varios pijamas y una montaña de medias y calcetines", explica una de las vendedoras que la atendió. Sólo se decantó por ropa cómoda y de estar por casa.